Nefab amplía sus capacidades de fabricación

PolyFlex, la empresa que ofrece soluciones sostenibles de empaque y logística y que forma parte del Grupo Nefab, amplía su capacidad de fabricación en León.

La intención del grupo es acelerar la producción interna de empaques termoformados de calibre grueso.

Se estima que esta, será la primera instalación en México que ofrece tanto empaques termoformados de calibre grueso como moldeados por inyección, y con ello, se posiciona a Nefab para proporcionar una gama completa de soluciones de empaques sostenibles adaptadas a los sectores de baterías de iones de litio (LiB), electromovilidad y automotriz.

Dicho desarrollo marca la primera fase de la inversión de la empresa en la región de Guanajuato, con equipos adicionales cuya instalación está prevista para finales de 2025 o principios de 2026.

“La ampliación de nuestra oferta de empaques de termoformado refuerza nuestra capacidad para servir a los sectores LiB, electromovilidad y automotriz de México”, dijo Ari Lezo, gerente de ventas de PolyFlex, parte del Grupo Nefab, México, quien añadió que la presencia local les permite estar estrechamente alineados con sus clientes, responder rápidamente a sus necesidades y mejorar la velocidad de comercialización con soluciones a medida”.

La planta de León complementa la oferta de empaques termoformados de calibre fino de las instalaciones de Nefab en Guadalajara. Trabaja junto con sus otras ubicaciones en Monterrey, Ciudad Juárez y Chihuahua, asegurando que la empresa satisfaga las diversas necesidades de los mercados automotriz, de vehículos eléctricos e industrial.

Equipo especializado

Los empaques termoformados de calibre grueso, diseñados para proteger piezas y ensambles complejos utilizados en LiB, vehículos eléctricos (VE) y motores de combustión interna, así como en otras aplicaciones industriales, garantizan el transporte seguro de componentes de gran valor como bandejas de baterías, estatores, rotores y motores.

Los empaques retornables termoformados de Nefab están diseñados para una cadena de suministro de circuito cerrado, apoyando la sostenibilidad a través del programa Plastic Circular Lifecycle, que se centra en la reutilización de plásticos, la reducción del consumo de materias primas y la minimización del impacto medioambiental.