“Con la localización de proveeduría logramos evitar hasta 25 semanas de tránsito, más el tiempo de liberación en puerto, por lo que se logra una operación más eficiente y competitiva”, dijo.
Proveeduría clave: las resinas
El principal insumo que Plastiexports busca sustituir son las resinas plásticas, un comodity indispensable en su proceso de manufactura. Entre las más solicitadas se encuentran ABS, polipropilenos, poliestirenos, acrilonitrilos, HIPS y TPs, entre otros.
"Actualmente estamos buscando proveedores de resinas, tanto nacionales como internacionales, pero priorizando los locales para disminuir la dependencia de mercados como China", mencionó la program manager.
Aunque la compañía trabaja con algunos proveedores locales, aproximadamente el 40-50% de sus resinas son de origen nacional, mientras que el resto continúa siendo importado de países como Estados Unidos y China. Este porcentaje refleja el gran potencial que aún existe para el desarrollo de la industria resinera en México.
Para quienes estén interesados en convertirse en proveedores de Plastiexports, Soria explicó el proceso: "Primero identificamos la necesidad del cliente. Luego buscamos proveedores, hacemos pruebas para cumplir con las especificaciones y gestionamos la parte administrativa para iniciar la relación comercial".
Además, recalcó la importancia de cumplir con certificaciones como ISO 9001, UL 94 (anti-inflamable), FDA y BPA, especialmente para productos de alta regulación como electrodomésticos y herramientas.
Operación plástica
Plastiexports tiene plantas en Apodaca, Nuevo León y Saltillo Coahuila; Charlotte y Tennessee (Estados Unidos.); y Shenzhen (China). Su portafolio abarca piezas para electrodomésticos, automotriz y herramientas, con clientes como Whirlpool, Carrier, Lennox, Milwaukee y Helen of Troy.
“La mayor parte de nuestra producción está enfocada en electrodomésticos, aunque también manejamos una pequeña parte en el sector automotriz", dijo Soria.
Retos
A pesar del esfuerzo de la empresa por apoyar a la proveeduría nacional, Dinora señaló que uno de los principales retos para los distribuidores mexicanos es la falta de infraestructura.
"Lo importante es que tengan bodegas para almacenar el material, porque muchos solo actúan como comercializadores que traen la resina de China", comentó al recalcar que contar con un "safety stock" es clave para garantizar una cadena de suministro eficiente y confiable.