Una oportunidad de negocio que ronda los 630 millones de dólares, representados por la voluntad de compra de alrededor de 45 empresas del sector aeroespacial, debe ser valorada por aquellas compañías que buscan crecer y atender nuevos mercados. La Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (FEMIA), a través de su programa de Desarrollo de Proveedores comandada por Xavier Hurtado, ha logrado conseguir un gran interés por parte de empresas originarias de Estados Unidos, Francia y Alemania para adquirir insumos y servicios por parte de compañías mexicanas.
“Hoy en día, el tema de proveeduría en el sector aeroespacial es una gran oportunidad de negocio. La voluntad de compra en México existe, solo hay que prepararnos para poder conectarnos con quienes están interesados en el país”, dijo Hurtado. A través de su programa de proveeduría, el cual tiene dos años de haberse fundado, la FEMIA ha logrado acercarse a 70 empresas compradoras en una primera etapa. De ellas, 45 brindaron paquetes de compra para que la Federación les ayudara a localizar proveedores en México. Hurtado señaló que en dicho programa la Federación ya logró contactar a más de 420 plantas para el sector, y a un 70% de ellas se les ha realizado una auditoría.
Al día de hoy, se han logrado realizar 500 conexiones de negocio, en donde se presentan presupuestos, y autoridades de compra y después se inician los procesos de cotización. “A cierre del año pasado teníamos 40 planes de desarrollo de proveedores y de ellos 15 proveedores ya han firmado un contrato, y han aprovechado compras por casi 37 millones de dólares”, comentó el especialista en proveeduría aeroespacial, quien agregó que sin embargo, todavía se tiene disponible el 95% de la bolsa de compras, lo que representa una gran oportunidad de negocio, sobre todo para aquellas aplicaciones como lo son interiores, aeroestructuras, motores y tren de aterrizaje”, dijo Hurtado, quien agregó que el sector está en busca de proveedores de forjas y casting, maquinados, estampados, inyección de plástico, compuestos, resinas, insumos para asientos y todo la parte de fabricación de componentes. Se estima que en México tienen presencia más de 270 proveedores que ya atienden al sector y que están en certificación, así como otros 130 más que quieren entrar a la industria.
México: ¿armador de aviones? Armar un avión en México es posible en el mediano plazo, si las autoridades en aeronáutica civil trabajan en favor de que esto ocurra, señaló Felipe de Jesús Sandoval, presidente de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (Femia). Dado que el 100% de los componentes de un avión ya son producidos en México, Sandoval opinó que únicamente falta armarlo y que éste salga volando, pero a falta de certificaciones para el motor y el avión, que debería otorgar la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), a la fecha es imposible que se instale una ensambladora aeroespacial. El también director de Zodiac Aerospace en Chihuahua, explicó que en México se fabrican desde los interiores del avión, así como la cabina, los asientos, el suelo, las paredes, el techo, los baños y las cocinas, hasta las alas y el fuselaje, por lo que solamente falta ensamblar las partes. “Las partes más críticas del avión ya se producen en México como son el motor, los trenes de aterrizaje y los sistemas de control. Todos los elementos ya están puestos para que en un futuro México pueda ensamblar un avión completo y sacarlo volando”, aseveró.
El directivo señaló que el sector aeroespacial en prometedor para México. Se estima que éste crece anualmente a un ritmo de 15% y en 2017 las exportaciones rondaron los 7,649 millones de dólares. Sin contar aún con las cifras oficiales que dejó el 2018, Sandoval adelantó que el sector podría haber alcanzado los 8,300 millones de dólares. Del total de piezas para aviones que se producen en México, aproximadamente el 80% es exportado a Estados Unidos y Canadá, por la cercanía. Mientras que el 20% restante es enviado a países de Europa. La industria aeroespacial le genera a México un superávit de 20% anual, además de un buen nivel de conocimiento tecnológico y académico, puntualizó el directivo de la Femia.
Una industria pujante A diferencia del sector automotriz, que es muy dinámico y sujeto a cambios por situaciones económicas externas, la industria aeroespacial es muy estable porque sus planes de trabajo se realizan a 15 años. En parte por ello, es que la industria aeroespacial se ha asentado y desarrollado con velocidad en México, pues de ese modo las cadenas de suministro gozan de estabilidad y rentabilidad, porque pueden hacer planes a largo plazo. En México hay al menos 312 instalaciones industriales del ramo aeroespacial. De ellas, el 80% se dedican a la manufactura, 11% a reparación y servicio, en tanto que el 9 por ciento restante está en el área de investigación y desarrollo. “Esto es muy positivo porque en la industria automotriz nos tardamos unos 50 años en brincar de manufactura a investigación y aquí esta industria en menos de 10 años ya tiene 10% de su instalación en investigación y desarrollo”, comentó el directivo.
Sector en crecimiento Se estima que en la industria aeroespacial de aviones comerciales, existe una demanda de más de 40 mil aviones, de aquí al 2036. Y los grandes jugadores como lo son las armadoras de los vehículos voladores deben evaluar como incrementar su producción y su capacidad de proveeduría, lo que representa una gran oportunidad, que si se sabe aprovechar, será de gran beneficio para el país. “Los aviones que tienen mayor demanda son lo que tienen un solo pasillo y que se utilizan para conectar sedes locales, allí es donde está la demanda a nivel mundial. En el caso de la producción, ésta ha ido creciendo y la meta, por ejemplo, para empresas como Boeing y Airbus, es la producción de más de 50 unidades anuales por empresa”, dijo Xavier Hurtado, quien agregó que: México tiene una gran oportunidad de hacer negocio y competir con Estados Unidos, pues en los próximos cinco años, en el país vecino se jubila el 50% de los trabajadores de las industria, por lo que se buscará instalar sede en otros países competitivos y México es uno de ellos.
Retos Hurtado indicó que la industria a nivel global en el tema comercial, está creciendo y si hay voluntad de compras hacia México. Sin embargo, lo que ahora tienen que hacer las empresas es su tarea, la cual consiste en comunicar lo adecuado, atender en tiempos más eficientes y cotizar de manera adecuada. Así como también es importante prepararse y capacitarse. Se estima que el 95% de las empresas que han visitado, no están al nivel de alistamiento que necesita el comprador. “Las empresas nos piden ubicar, elegir y calificar al proveedor en México. Sin embargo, hay varios retos a los que se enfrentan los encargados de compras cuando buscan un nuevo proveedor, al igual que nosotros. Uno de ellos es que los directorios industriales no muestran especificaciones en sus plataformas digitales, por lo que no podemos conocerlos de una manera detallada, en una primera instancia”, dijo Hurtado.
Por ejemplo, si un comprador busca un proveedor de maquinados y necesita que cumpla con alguna mínima cantidad de espesor, será difícil encontrarlo. “Es decir, en México existen más de 300 proveedores de maquinados, pero el comprador tendrá que hablar uno por uno, hasta encontrar a alguno que maneje las medidas y espesores necesarios, lo que se convierte en una situación tediosa y cansada para el comprador. Creerá que en el país no existe quien le brinde el servicio, sin embargo, el problema es que no cuenta con una herramienta que le ayude a dar con ese proveedor”, dijo. Hoy en día, el área de maquinados es de gran relevancia en el sector, pues se tiene una voluntad de compra por más de 60 millones de dólares . Otro de los retos a los que se enfrentan los proveedores es a la competencia mundial, contra proveedores de países asiáticos y europeos. “Ya basta de compararse con el proveedor local o aquel que se ubica a dos cuadras. Hoy en día, la competencia es a nivel mundial, y para ello es necesario adquirir nueva maquinaria, más rápida y eficiente, pero también es de gran importancia la calidad, y asegurarla con los sistemas de gestión más actuales” ,dijo el especialista en proveeduría aeroespacial, quien agregó que en FEMIA se acompaña al proveedor en todo el proceso. Se localizan los recursos e incentivos a los que pueden aplicar para prepararse o adquirir nuevas tecnologías, de manera que el proveedor pueda salir victorioso y prepararse para aprovechar la oportunidad de negocio en el sector.
Otro de los retos a los que se enfrentan los proveedores que desean atender al sector aeroespacial, esa la creación de innovación e ingeniería. “Hoy por hoy somos un país build to print, lo que significa que la mayor parte de las empresas del sector reciben un dibujo del comprador y el proveedor solo programa la maquina y hace el proceso de manufactura. Y lo que hoy se busca es un músculo de ingeniería inversa, es decir, te dan el componente y tu debes programar la máquina, lo que implica tener una capacidad de diseño”, dijo. “Otro de las cosas que solicitan los compradores por parte de empresas ubicadas en México es que sus presentaciones de ventas o sus páginas web sean más claras y precisas”, señaló Hurtado, quien comentó que a los compradores no les interesa la visión o misión de su proveedor, sino más bien, desean encontrar información sobre el proceso de manufactura que se realiza; las dimensiones de las piezas que pueden trabajar; la cantidad de máquina que posee; la capacidad para atender nuevos clientes; el tipo de materias primas o aleaciones que pueden manejar; detallar si la empresa es manufacturera, distribuidora o reparadora de partes aeroespaciales; así como es de gran importancia los certificados de calidad.