“Lo que estoy buscando es regionalizar la proveeduría, tenemos un montón de proveedores en Alemania porque somos una empresa alemana y lo que estamos buscando es tener más proveedores mexicanos, no nada más por el tema de costos sino para desarrollar la economía local”, explicó el gerente.
Para atender el área de proyectos la compañía está interesada en proveedores de troqueles, moldes, entre otros.
Para formar parte de la cadena de suministro de Grammer, las compañías interesadas deben contar con la certificación ISO 9001:2015 y IATF 16949 que garantiza la mejora continua.
El gerente agregó que la proveeduría nacional y local es rentable por su calidad, por lo cual localizan a empresas a fin de surtir los insumos en el Bajío.
Sin embargo, aseveró que existen áreas de oportunidad para que los proveedores puedan mejorar en el tema del cumplimiento.
En el último trimestre de este año, esta empresa enfrenta retos en proveeduría, debido a que la emergencia sanitaria ocasionada por el COVID-19 afectó a algunas compañías que surten a Grammer Automotive y no cuentan con la solvencia económica, lo que generó una sustitución.
“Algunos de nuestros proveedores son pequeños que no tienen la solvencia económica y la pandemia vino a perjudicar a todos, a esos proveedores les está costando salir adelante. Tenemos casos de proveedores, un proveedor específico del Estado de México que ya no pudo seguir operando y tuvimos que desarrollar a un nuevo proveedor”, dijo el encargado de compras de proyectos.
Producción automotriz
Cabe mencionar que en la planta de Querétaro se fabrican cabeceras, consolas centrales, sistemas para asientos y descansabrazos para autos premium y marcas comerciales. Por otro lado, Grammer Automotive tiene negocios con otras industrias como agricultura, construcción, navieras y paisajismo.