Tras un largo periodo y años de pruebas en donde intentaban determinar cuáles materiales eran los que se podían usar, cuáles eran ecológicos o no, llegaron a la conclusión de que el PET es uno de los principales contaminantes en el planeta y el océano. Por lo que tomaron la decisión de incluirlo en sus productos de manera reciclada, sin embargo, recientemente incorporaron el sargazo para producir una suela.
“Tuvimos que investigar mucho, probamos con corteza de árbol, papel periódico, entre otras pruebas hasta llegar con la botella de PET. Averiguamos ¿cuáles son los componentes de la botella de PET?, ¿qué es lo que podíamos hacer?, realizamos muchas pruebas antes del PET, y nuestro primer desarrollo, es un material de poliéster y PET reciclado” comentó Jorge Castro, fundador.
Y pasaron siete años desde que inició la idea hasta que comenzaron de lleno con el movimiento del producto y realizaron las primeras ventas. Incluso, hace cinco años fue presentado en la Feria Internacional del Calzado y Artículos de Piel, Sapica, en donde no obtuvieron resultados favorables, debido a que el producto era mal visto pues consideraban rompía con el esquema de economía lineal actual.
“Estas cuidando al planeta, estas evitando que llegue plástico al océano, lagos, bosques, pero no les interesa por la falta de conciencia y cultura” agregó.
Por su parte, Mario López, co-fundador y socio agregó que el camino no ha sido sencillo, aunque han encontrado personas como el Ing. Químico, Octavio Sierra, quien los apoyó y abrió las puertas cuando muchas otras se cerraban.
El innovador empresario comentó que a la fecha cuentan con una capacidad de producción de 20 mil pares mensuales, pero están en busca del apoyo de un gran comercializador para comenzar a producir en masa y colocar el producto.
“No estamos cerrados a que entren nuevos colaboradores que aporten a la empresa, debido a que actualmente toda la producción es bajo pedido”, dijo López.
Con un par de las botas Renovaré lanzó al mercado con un precio de mil 200 pesos se evita el cinco botellas de PET en el planeta. La compañía también se encarga de extraer el sargazo, por ahora de las playas de Cancún, que es una macro plaga que mata a los peces y corales. Dicha materia es transformada en una suela para el tenis que están por incorporar al mercado y ya tienen compradores interesados en Cancún.
La innovación de la empresa es real, pues nadie ha realizado un calzado ecológico, y empresas ubicadas en el centro y norte de México, así como en Estados Unidos ya están intresados en sus productos.
“Estamos en pláticas para mandar el producto y comercializar en masa en México, eso es lo que necesitamos, porque a medida que producimos más damos ese brinco y combatimos más la contaminación. Queremos buscar ese canal de distribución que venda en masa y con el que seamos partners y poder innovar en otros productos”, dijo López.
El calzado cuenta con todas las pruebas de laboratorio, la suela cubre desgaste de abrasión, desgarre, fricción, y es totalmente del performance de un calzado convencional.
