La industria, ¿amiga o enemiga de la sociedad?
Encuentran hallazgos para descifrar la relevancia de ello en el país
¿Podríamos concebir nuestra vida con todos los avances tecnológicos que tenemos el día de hoy sin la minería? Me queda claro que los ingenieros que están detrás de la operación para poder contar con el cobre tienen muy clara su valiosa aportación, además de apegarse a estrictas normatividades y lineamientos de carácter ambiental.
¿Qué es lo que está fallando para que nuestra sociedad sea más consciente del papel esencial que juegan las distintas industrias para el progreso?
Para tener un mejor entendimiento sobre la percepción del sector industrial, en LLYC analizamos 37,857 menciones en redes sociales sobre temas que conciernen al sector industrial a partir de herramientas de Big Data, Inteligencia Artificial y Machine Learning.
Algunos de nuestros hallazgos son los siguientes:
-No se encontró participación sustancial de las empresas del sector privado en la conversación del sector industrial, la conversación es liderada por perfiles de gobierno, asociaciones y ONG’s.
-Aunque existe mucha representación de las empresas en la conversación, pocas veces se encuentra participación de los equipos internos o colaboradores.
-La falta de control de la narrativa por empresas y perfiles de altos ejecutivos del sector, ha permitido que crezcan los espacios de desinformación y que se cuestionen las acciones que éstos toman en beneficio de los países donde operan.
-República Dominicana es un gran ejemplo de los resultados positivos que tiene la participación del sector industrial en la conversación pública en el sector minero, donde a través de su estrategia de comunicación han mejorado su posicionamiento e incrementado el nivel de conversación positiva.
La conversación de terceros sobre la industria se enfoca en el desempeño financiero, pero no ahondan en otros temas con la misma profundidad.
A partir de esto podemos inferir que son notorios los vacíos informativos sobre lo que es y hace la industria. Terceros están liderando la conversación sobre el sector, a veces con un foco negativo. Por ello, los dirigentes del sector deberían de estar obligados a poner en marcha un nuevo liderazgo y ser los protagonistas de su narrativa, no solo como gremio, sino como seres humanos para conectar mejor con sus múltiples audiencias.