La compañía enfocada en la mejora continua de los procesos productivos apoya a sus clientes en reforzar su sistema de calidad a través de diversos servicios, como lo es el entrenamiento, inspección y re-trabajos, así como la implementación de sistemas de automatización y control como sensores, poka jokes o herramientas que impidan producir con defectos.
“Nuestra empresa se diseñó para proteger los procesos productivos y que las piezas producidas se entreguen con la calidad necesaria y especificada por el cliente”, dijo Ricardo Canales, director de la compañía.
“Somos un brazo de herramientas que utilizan las armadoras y los propios Tiers, damos servicio de apoyo hombro a hombro en las líneas de producción para mejorar o contener los posibles problemas de calidad que tienen las empresas en sus plantas operativas”, comentó.
Ya sea en su sede, o en el área operativa del cliente, COFEMSA realiza la inspección o re-trabajo necesario para cumplir con la calidad de las piezas.
“Podemos ofrecer desde algo muy sencillo, como quitar rebabas de piezas plásticas, o hasta algo más complejo como lo es la reparación de un casting, al cual hay que realizar un proceso de desoxidación o procesos más específicos”; ejemplificó Félix Mendoza, director de operaciones, quien agregó que una de las ventajas de sus servicios, es que el cliente se puede enfocar a su operación.
La compañía también cuenta con herramientas y tecnologías que permiten autenticar la calidad de las piezas, las cuales ponen a la orden de sus clientes. Tal es el caso de barómetros, inspectometros, y herramientas especializadas para el control de calidad.
Generadores de valor
Mendoza indicó que a diferencia de sus competidores, COFEMSA se convierte en la mano derecha de todo cliente, es decir, en una parte esencial de la compañía, que más allá de preocuparse por seguirle dando un servicio, los prepara y ayuda a que el control de la calidad se alcancen en el menor tiempo posible.
“Nosotros nos integramos a sus sistemas de trabajo y sistemas de calidad, y el trabajo que hacemos lo enfocamos a dar valor brindando retroalimentación y data a nuestros clientes para que ellos puedan tomar acciones correctivas, mejoren sus procesos y si a las tres semanas ya logran detectar y corregir sus errores, nosotros nos retiramos. No necesitamos estar tres años allí, lo que nos interesa es que ellos adopten lo necesario para ser eficientes”, dijo Mendoza.
El directivo aconsejó a las compañías a no ver a este tipo de organizaciones (especializadas en inspección y re-trabajamos y automatización), como un mal necesario, sino como una organización que puede aportar mejora a sus sistemas de trabajo.
“Podemos llegar al mismo objetivo que tenemos todos, a mejorar la calidad, a impulsar la industria y a toda la cadena de suministro para hacer de la industria automotriz nacional, la más grande a nivel mundial”, dijo.