“Los pronósticos de crecimiento del PIB para este año son muy bajos, recientemente disminuyó a una expectativa de 2.8 o menos y eso definitivamente nos afecta a la industria de la construcción, nosotros teníamos una expectativa de crecimiento para este año del 4 por ciento y creo que nuevamente tendremos que ajustarnos”, mencionó.
Y es que tras un primer trimestre no tan favorable, habían ajustado y a su expectativa anual de crecimiento a 3%, 1.5 puntos porcentuales por debajo de la aspiración inicial que se había estimado a principios del año.
Ante este panorama, los constructores han optado por desarrollar inversión de infraestructura a través de las asociaciones público-privadas.
Para ello, la CMIC NL lanzó el Diplomado Modelos de Contratación en Asociaciones Público Privadas, dirigido a socios, empresarios, funcionarios públicos titulares y de primer orden en las áreas de obras públicas, tesorería y finanzas.
No obstante, la baja producción de petróleo y la caída del 2 por ciento de la producción industrial de Estados Unidos, no es lo único que mantiene a los constructores atentos, también el conflicto del acero.
“Nos preocupa el problema con los precios del acero, pues nos pega a los proveedores nacionales y todo aquél riesgo o perjuicio a ellos, desplaza mano de obra nacional y eso lo vemos con preocupación porque nosotros ocupamos mucha mano de obra y los movimientos en el mercado de oferta y la demanda de mano de obra nos perjudica”, agregó Ramos García.
Estadísticas
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) el sector secundario del país creció en tres de sus cuatro componentes respecto al periodo enero-marzo de 2015.
La industria manufacturera (3%), la construcción (2.8%) y la generación, trasmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas (1.6 %).
“Estamos muy atentos a la falta de financiamiento, para nuestra industria es fundamental y se está recortando; también la inversión pública es una preocupación muy grande, hay subejercicio del que quedó autorizado y todo eso se ve reflejado en una menor inversión en infraestructura y hasta donde nos han comentado algunos diputados no hay grandes incrementos en la inversión en pública e infraestructura en el Presupuesto de Egresos de la Federación del 2016”, puntualizó Ramos García.
