Ricardo Sánchez, MBA Gerente de categoría regional de Carrier, comentó que debido a que la logística a nivel mundial se ha vuelto un reto y el constante crecimiento regional parte del nearshoring es que buscan incrementar su base de proveeduría de forma regional.
“El contar con proveedores confiables en México nos brinda una ventaja competitiva, por lo que estamos en busca de nuevos socios comerciales que sigan nuestros valores y cumplan nuestra expectativa como una empresa líder a nivel mundial”, dijo.
Actualmente, la compañía requiere de proveedores que ofrezcan procesos diversos en plásticos, gomas y aislamientos, así como de maquinados y estampados.
“Buscamos relaciones de largo plazo, con proveeduría cercana y capaz de atender nuestras demandas”, resaltó el experto en suministro.
Para ser parte de la cadena de valor de Carrier, los proveedores deben contar con el certificado de calidad en ISO 9001:2015, así como con el IATF 16949. Adicional, deben cumplir con un alto nivel de ética, profesionalismo y constante búsqueda de la innovación.
Eligiendo al mejor proveedor
Para elegir a su mejor proveedor, la compañía cuenta con un área de búsqueda y desarrollo de proveedores, el cual evalúa en conjunto con grupos interdisciplinarios de calidad e ingeniería, las habilidades y capacidades de cada proveedor potencial en la región.
“Se realiza una auditoría en las locaciones del proveedor de sus procesos administrativos y productivos. El proveedor incluso inicialmente debe evaluarse a sí mismo. Le damos recomendaciones de lo que debe cambiar en caso de ser necesario para mejorar sus procesos. El costo, calidad de sus procesos y productos, los tiempos de entrega y los requerimientos de acuerdo con la categoría específica del proceso son evaluados por nuestro equipo. Posterior a esto se realizan pruebas con los productos para validar su calidad y funcionalidad, para poder garantizar la selección del mejor proveedor”, explicó Sánchez.
El directivo añadió que el tiempo en el que un proveedor es desarrollado, puede variar, dependiendo del nivel de éste y complejidad del producto.
“Si se empieza con él desde cero, puede tardar de seis meses a un año dependiendo de su avance y controles. Pero si es uno que cumple con las normas y cuenta con todo lo necesario para ser proveedor, su integración puede tomar seis meses, aproximadamente”, comentó el experto en el tema de insumos.
La empresa en México
En Nuevo León, la empresa cuenta con seis plantas y se especializa en la producción de equipos HVAC para el sector comercial y residencial.