Difícilmente alguien pudiera predecir con certeza el entorno laboral y económico que viviremos en el presente año 2011 que recién comenzó. Distintos temas y contextos estaremos viviendo tanto a nivel local, nacional e internacional. Quizás una buena medida para neutralizar un poco los impactos, es estar lo mejor informado posible para identificar lo que acontece y atenuar en la medida de lo posible, cualquier tipo de impacto negativo.



En el ramo económico y laboral, el año anterior fue difícil ya que nuestro país continuo siendo afectado por distintos fenómenos como fue el tema de la inseguridad, recesión económica, así como los impactos a la infraestructura publica en la región, originado por el huracán “Alex”. No obstante, los indicadores macroeconómicos parecieran ser más positivos que los hechos negativos antes mencionados, que lamentablemente impactaron a nuestro país durante el 2010.


En el Estado de Nuevo León, a pesar de las distintas problemáticas que afectaron la región, como lo fue el tema de inseguridad, los estragos del huracán Alex, la crisis económica entre otros problemas, se crearon durante el 2010, mas de 76,962 nuevo empleos, siendo la entidad, después del Distrito federal con mayor empleo generado. En el 2009 los números fueron negativos, es decir se perdieron 25,396 empleos en Nuevo León, hoy tenemos un superávit de 76,962, inclusive pudieran haber sido mas, sin embargo, debido al ciclo económico se perdieron en el mes de diciembre, poco mas de 23,000 empleos.
Así mismo, se tuvo una inversión extranjera de $2,238 millones de dólares, generando más de 7 mil nuevos empleos. Es importante mencionar que existe un “desfase” entre los empleos generados y la contabilidad de los mismos dentro del empleo generado en inversión extranjera en todos los años, incluyendo obviamente el 2010, ya que dependiendo el caso y naturaleza de la inversión, los empleos pueden llegar a tardar de uno a dos años en lo que se “materializan” los empleos de “facto”. Este último comentario, me lleva a realizar otro análisis desde diferente perspectiva.


Si bien es cierto, durante el 2010 y el 2009, los pequeños, medianos y grandes empresarios y corporaciones tanto locales como extranjeras, realizaron inversiones conforme a sus planeaciones de años anteriores a los años antes mencionados, generando por ende, nuevos empleos mismos que los vimos reflejados durante el pasado 2010. Por otro lado, durante los pasados 2009 y 2010, no se realizaron el mismo “ritmo” de planeaciones de inversión por las distintas problemáticas que ya hemos mencionado en párrafos anteriores y que actualmente aun enfrenta nuestro país y nuestra región. Esto quiere decir que muchas de las planeaciones para realizar inversiones grandes o pequeñas que se dejaron de hacer en el 2009 y 2010, no van a generar el mismo número de empleos para 2011 y 2012. Es decir si no se “sembró”, difícilmente se puede levantar cosecha “a posteriori”.


Lo anterior traería como consecuencia que el 2011, pudiera presentarnos un reto mas difícil que el año anterior, sin embargo, son en estos casos o hipótesis en donde el papel que debiera plantear el Gobierno tanto Federal como Estatal, debiera ser mucho mas agresivo e inclusive, aunque no de manera permanente, una política de mayor apoyo hacia el sector privado. Es decir, en caso concreto, sumar mayores esfuerzos y presentar mayores incentivos al sector empresarial y/o iniciativa privada para incrementar una mayor vinculación laboral y por ende una mayor colocación de empleo; esto ultimo, mediante la facilitación de la generación del empleo per-se por un lado, el apoyo a través de los distintos programas de fomento al empleo, para neutralizar, en la mayor “expresión” posible, los gastos que incurren los generadores de empleos al momento de generar y contratar nuevas fuentes de trabajo y por otro a los buscadores de empleo, mediante la capacitación de acuerdo a las necesidades del mercado.


Si bien es cierto, para algunos críticos esto pudiera ser interpretado como una política asistencialista o inclusive populista, sin embargo, contrario al Neoliberalismo, la realidad es que lamentablemente el sector privado no ha podido generar la riqueza y desarrollo económico que se requiere para generar un bienestar social en la población. Por consiguiente es necesario una o combinación de Neoliberalismo acompañado de una asistencia social, es decir un liberalismo social muy similar al que se vivió a principio de la década de los 90’s.


Los números macroeconómicos anunciados recientemente por el Gobierno Federal reflejan sin duda un comportamiento positivo en el entorno laboral y económico del país, sin embargo, existe aun mucho trabajo por hacer, debido al rezago y bajo crecimiento que se ha tenido en los últimos años. La región del noreste de nuestro país, en donde se encuentra el mayor desarrollo económico y prácticamente la mayor generación de empleos que ninguna otra zona del país genera el 20% del total de los empleos generados en México. Solo el Estado de Nuevo León genera poco más del 12% de todos los empleos del país. En cinco entidades federativas, El DF, Nuevo León, Estado de México, Coahuila y Jalisco se generaron casi el 50% del empleo de nuestro país. Estas 5 entidades crearon el 49.8 % con 363,988 empleos nuevos de los 730,348 creados en la Republica en todo el 2010. Esta cifra es considerada la más alta en los últimos 14 años. No obstante, la tasa de desempleo en Nuevo León es del 6.45% a nivel estatal, equivalente a poco mas de 140,000 desempleados. Existe aun mucho trabajo por hacer.


El estado de Nuevo León ha experimentado una dinámica muy marcada en cuanto a la cantidad de personas que se encuentran en el mercado de trabajo en busca de empleo. Así mismo el número de vacantes ha aumentado, así como los buscadores de empleo. El rango de edad que mayor participación tiene, fue el que se encuentra en los 20 y 29 años de edad. Estos solo representan mas del 44%. Por lo anterior son el grupo que pudiéramos considerar mas vulnerable o bien que mayor atención requiere en cuanto a la formación de mano de obra calificada, con el objetivo de volver a este segmento de la población, mas “candidateables” a ocupar los puestos de trabajo o vacantes generadas por el sector empresarial.


En conclusión, hoy en día, se tienen grandes retos tanto en Nuevo León como en todo el país el año 2011 nos presenta retos difíciles que hacen de este año, de difícil predicción. A pesar de los resultados obtenidos el año anterior en cuanto a generación de empleos y desarrollo económico, mientras la población continúe teniendo las carencias y falta de un empleo que les permita un bienestar social, cualquier tipo de progreso o incremento en los números macroeconómicos carecerán de todo sentido, mientras éstos no reflejen un bienestar social y crecimiento económico para la población colectiva de nuestro país y por ende en nuestra región. 2011 es un año de oportunidades para los que participamos desde el sector público laboral y económico.

El sector privado, necesitara hoy mas que nunca de los apoyo y vinculación laboral con el sector gubernamental a través de los apoyos y/o programas para la generación de nuevas fuentes de trabajo, es nuestro deber y obligación ayudarlos. No pueden pedir por caridad lo que tienen derecho a recibir derecho y justicia económica y social.