De acuerdo a una base de diversos análisis realizados sobre la exitosa industria aeroespacial de México, se identifica que el incipiente desarrollo de la proveeduría secundaria y terciaria (Tier-2 y Tier-3) es su talón de Aquiles.
Cabe destacar que el país se ha convertido en uno de los 14 principales proveedores de piezas aeroespaciales del mundo y el sexto para Estados Unidos, sin embargo, la estructura interna del clúster aeroespacial mexicano sigue siendo inestable.
El sector cuenta ya con más de 200 grandes empresas extranjeras (Armadoras y Tier-1) que han establecido fábricas de gran tamaño en el país, pero tiene pocas empresas locales o extranjeras (de tamaño pequeño o medio), capaces de desarrollar los procesos altamente especializados que el sector requiere, tales como anodizado, tratamiento térmico de metales, tratamientos químicos y pruebas no invasivas de componentes, entre otros.
Lo anterior lo indicó Sergio L. Ornelas, organizador de la sexta edición de Mexico’s Aerospace Summit 2016, cumbre de negocios especializados en la industria de manufactura aeroespacial que se llevará a cabo los días 29 y 30 de septiembre en el Centro de Congresos de la ciudad de Querétaro. Asimismo, mencionó que estos procesos especializados son llevados a cabo en Estados Unidos y Europa típicamente por una red de pequeñas y medianas empresas que dan servicio a varios fabricantes. Esa red todavía no existe en México, y podría ser un obstáculo fundamental en el crecimiento del sector.
Eso deja a las grandes fábricas aeroespaciales en México con dos opciones. Primera, crear una fábrica totalmente autónoma, integrada verticalmente, capaz de llevar a cabo toda la gama de procesamientos y pruebas especiales. Segunda, pueden enviar las piezas parcialmente completadas por la frontera de Estados Unidos o Europa para trabajos pequeños - y luego de vuelta a México para terminarlas.
El especialista en el tema destacó que algunas grandes empresas han logrado integrar verticalmente procesos especiales en sus instalaciones a un costo elevado, mientras otras incurren altos costos de logística para trasladar las partes de un país a otro en repetidas ocasiones. Estos eslabones perdidos que forman parte de la base de proveedores Tier-2 y Tier-3, y que deben existir localmente, son esenciales para que la cadena de suministro pueda lograr un desarrollo maduro en la industria.
Dificultades en México
No obstante, un problema perenne en México para el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas es la falta de capital y crédito. La industria aeronáutica en México ofrece una oportunidad extraordinaria para el operador más pequeño para unirse a la cadena de suministro.
Por lo es que es necesario que los gobiernos federales y estatales participen con apoyo como lo hacen los europeos, Estado Unidos y Canadá con diversas iniciativas para fomentar la creación de estos eslabones perdidos, tales como establecer un fondo de financiamiento especial y específico para el sector aeroespacial de empresas pequeñas y medianas de nueva creación, proporcionar medios para casar el capital privado con empresarios, así como impulsar incubadoras, o “start-ups” para lograr integrar a los operadores nacionales a la cadena de suministro aeroespacial.