EN BREVE/
< Además del empaque y embalaje, que incluye cajas y etiquetas, se ha observado que las escamas de pescado poseen propiedades eléctricas importantes.
El prototipo principal del proyecto de Dalila es una placa de aproximadamente 20 centímetros de diámetro que se puede elaborar en un tiempo aproximado de 30 minutos. El grosor depende de la cantidad en gramos de escamas que se utilicen. >
La industria del empaque y embalaje podría transformarse radicalmente teniendo como materia prima escamas de pescado; así lo sugiere una investigación realizada por Dalila Cruz Fabián, egresada de la Maestría en Diseño e Innovación de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
Como parte de su tesis de posgrado Cruz Fabián desarrolló materiales de diferentes texturas y resistencias elaborados con escamas de pescado, con el fin de generar alternativas sustentables al uso de productos plásticos.
“Todo surge por la acumulación irracional de los productos que la gente consume. Estuve investigando y en el mundo hay, por ejemplo, dos islas de basura en el océano repletas en un 90% de plástico”, comentó.

Dalila Cruz Fabián, egresada de la Maestría en Diseño e Innovación de la UAQ.
» Dalila Cruz Fabián, egresada de la Maestría en Diseño e Innovación de la UAQ.

Cruz refirió que en Europa hicieron ya un plástico con escamas de pescado, no obstante que se conocen muy pocos detalles al respecto.
“Empezamos a experimentar con las escamas en la maestría como tema de tesis, les dimos diferentes tratamientos y pudimos obtener un material muy parecido al papel batería, que es como un cartón. Ahora queremos aplicarlo a la industria del empaque y embalaje”, detalló.
Indicó que el objetivo final del proyecto es poder escalar a la textura plástica.
“Creemos que este material (las escamas de pescado) tiene mucho potencial porque al provenir de la naturaleza y ser 100% biodegradable podemos transformarlo, utilizarlo y después desecharlo sabiendo que su ciclo de vida estará completo”.


Los resultados finales de la investigación realizada por Cruz Fabián estarán en su tesis de maestría, a publicarse en un par de meses. Actualmente el método está en proceso de patente.

OTRAS APLICACIONES
Además del empaque y embalaje, que incluye cajas y etiquetas, se ha observado que las escamas de pescado poseen propiedades eléctricas importantes.
“Creemos que si se sigue investigando y desarrollando el material puede tener aplicaciones no solamente en este tipo de industria sino también en la eléctrica, en la mecánica y en la industria de papel que en lo general es muy grande”, dijo Cruz Fabián.


El prototipo principal del proyecto de Dalila es una placa de aproximadamente 20 centímetros de diámetro que se puede elaborar en un tiempo aproximado de 30 minutos. El grosor depende de la cantidad en gramos de escamas que se utilicen.
La emprendedora dijo que al poder escalar dicho prototipo y poder producirlo en grandes volúmenes los precios disminuirían, e incluso los tiempos también.
“El proyecto propone ser una innovación social, esto significa poder llevarlo a cualquier comunidad pesquera que esté interesada para que la comunidad pueda elaborar sus productos dado que las escamas las tendrían en grandes volúmenes y locales”, indicó.